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Sugerido por Henrique, o outro
Do Página 12
El mercado interno fue uno de los factores que explicaron el crecimiento. También la producción industrial, la cosecha y el repunte de la actividad de la construcción.
La actividad económica avanzó 7,8 por ciento en mayo respecto del mismo mes del año pasado. En los primeros cinco meses de 2013, la expansión fue de 4,9 por ciento interanual, según el Indec. El consumo del mercado interno fue uno de los factores que explicaron el crecimiento. También la producción industrial, que registró el mejor desempeño desde 2011. Además, la cosecha record del campo, el repunte de la construcción y la venta de autos a la plaza brasileña.
La expansión del consumo interno fue central para explicar el desempeño de la actividad económica. Entre los indicadores que reflejaron ese dinamismo de la demanda local se destacaron los siguientes. La recaudación tributaria por concepto de IVA fue de 20.323 millones de pesos en mayo, al aumentar 28,6 por ciento interanual. La venta en supermercados registró un alza de 28,3 por ciento interanual. La facturación de los centros de compra (shoppings) aumentó 38,7 por ciento en los últimos doce meses. El patentamiento de autos fue de 89.644 unidades en mayo, un 17 por ciento más que en el mismo mes del año pasado.
Existen distintos elementos que explican ese crecimiento del consumo. A continuación se precisan algunos:
– la creación de 84.000 nuevos puestos de trabajo en los primeros meses de este año. Ese dato adquiere relevancia si se tienen en cuenta las tensiones en el mercado laboral que atraviesan distintas economías del mundo a partir de la crisis de las potencias maduras.
– la informalidad se redujo a niveles mínimos históricos (32 por ciento de los trabajadores).
– la participación de los asalariados en el Producto alcanzó el 55 por ciento. El Informe Macroeconómico del Banco Central precisó además que en la convertibilidad fue en promedio de 44 por ciento.
– el aumento de las jubilaciones y pensiones desde marzo.
– la transferencia de ingresos del Estado hacia sectores de menores recursos con alta propensión a consumir. En junio se redobló esa apuesta con el incremento de 35 por ciento para la Asignación Universal por Hijo. Si se cuentan además las Asignaciones Familiares, los planes estatales ofrecen cobertura para 7.000.000 de chicos.
El repunte de la actividad industrial fue otro elemento que explicó la expansión de la economía. La producción manufacturera registró un alza de 5,2 por ciento en mayo respecto del mismo mes del año pasado. Eso se debe a dos motivos. Uno: la baja base de comparación, tras la desaceleración del sector en 2012. Dos: la recuperación de las terminales automotrices. La fabricación de autos de mayo fue de 79.590 unidades, al aumentar 32,2 por ciento respecto del mismo mes del año pasado. Además, la industria química registró un incremento del 9,6 por ciento interanual, mientras que la rama de minerales no metálicos avanzó 3,3 por ciento.
El dato notable fue la recomposición de la exportación de los bie-nes industriales. El crecimiento de esas ventas resultó distintivo si se lo compara con el desempeño de otros países de la región. En Argentina, los despachos manufactureros avanzaron 1,3 por ciento en los primeros cinco meses del año, mientras que habían retrocedido 1,4 por ciento en el mismo período de 2012. En Brasil, las exportaciones industriales disminuyeron 5 por ciento en 2013, cuando habían aumentado 4,1 por ciento entre enero y mayo de 2012. En Chile, las ventas al resto del mundo desaceleraron al 0,6 por ciento, contra la expansión del 1,8 por ciento del año pasado. En México, los permisos de embarque de productos industriales también marcaron fuerte desaceleración. Esas exportaciones aumentaron 2,1 por ciento en el acumulado enero-mayo, cuando lo habían hecho al 10,3 por ciento en el mismo período de 2012.
La principal razón del repunte de las exportaciones manufactureras de Argentina fue la recomposición de relaciones comerciales con Brasil en el segmento de automotores. Ese socio comercial incrementó significativamente la compra a terminales locales, en detrimento de otros productores como Estados Unidos y la Unión Europea. El resultado fue que la participación argentina en la importación de autos de Brasil pasó de 40,4 por ciento en los primeros meses del 2012 al 57 por ciento este año.
En enero y mayo, las automotrices argentinas incrementaron 44,4 por ciento las exportaciones. Esas ventas fueron en gran parte hacia el país vecino. En ese mismo período, el patentamiento de vehículos en el mercado brasileño creció 9 por ciento interanual.
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